Tacuba

Tacuba es un municipio del departamento de Ahuachapán, en El Salvador. El censo más reciente (2013) refiere un total de 31,209 habitantes. Ocupa un área de 149.98 km2  Tiene una altitud de 720 metros sobre el nivel del mar.

Datos geográficos

Las fronteras que delimitan el municipio de Tacuba, comprenden por el Norte con el municipio de Ahuachapán y Guatemala; por el Este con Concepción de Ataco y Jujutla; por el Sur con Jujutla junto con San Francisco Menéndez y por el Oeste, con San Francisco Menéndez. Es un territorio dividido en 14 cantones.

Datos fundacionales

Tacuba fue fundada en el siglo XII. Esta población es de origen Náhuat. Su topónimo significa “patio de juego de pelotas”.

Durante la época colonial perteneció al departamento de Sonsonate; hasta que, en 1832 pasó a formar parte de los municipios de Ahuachapán.

Esta población fue escenario de fuertes confrontaciones entre los hacendados y los indígenas, durante las primeras décadas del siglo XX.

Desarrollo económico

Tacuba es una zona eminentemente cafetalera; aunque, su tierra da cabida a otros cultivos como la caña de azúcar, cereales, semillas oleaginosas, cacao, cocotero, frutas y plantas de huerto.

La cría de ganado vacuno, aves de corral, abejas, son, también, fuente de alimentación y sustento del aparato productivo de la región.

Esta tierra fecunda y generosa es, además, asiento de importantes industrias, como la basada en energía geotérmica, la fabricación textil, y la generadora de materiales para la construcción.

Ruta turística

  • Múltiples son las opciones de interés turístico que guarda esta hermosa región. Sus atractivos ofrecen la posibilidad de entrar en contacto con las ruinas de la época colonial, como por ejemplo, las pertenecientes a una iglesia católica que data de principios del siglo XVII, llamada Santa María Magdalena.
  • La iglesia en cuestión,  de estilo barroco neoclásico, fue destruida por un terremoto acaecido en el año 1773. Aún, se mantiene en pie su fachada enorme que alcanza los 40 metros de altura. El espesor de sus paredes mide más de un metro.
  • Estos vestigios de la época colonial son realmente impactantes por su imponente presencia y una oportunidad para tratar de recrear la historia y apreciar la labor de construcción de los antepasados, en escenarios como éste.
  • Otro lugar que invita al disfrute es el Parque Nacional El Imposible, cuya enorme extensión hace que éste, sea parte de varios municipios. Su fauna y flora diversa lo hacen apropiado para el ecoturismo, y la práctica del senderismo, las caminatas, entre otros.
  • La hidrografía, también, presente en el municipio Tacuba, a través de los ríos que lo surcan, como el Río de Paz, es un destino infaltable para un baño refrescante, rodeado de hermosa naturaleza.
  • Para los amantes de la belleza de la naturaleza, el municipio Tacuba, forma parte de la Ruta de Las Flores, trayectos señalados por sus autoridades nacionales y locales, en sus planes para la promoción y desarrollo turístico de la región salvadoreña. Un recorrido que destaca grandemente la gastronomía, la artesanía y la naturaleza de cada región que comprende.
  • En Tacuba, precisamente, acaba La Ruta de Las Flores, y entre otros aspectos de interés está la divulgación de técnicas naturales, para el cultivo del café, y su recolección.  Así como, extensas siembras de flores y cereales, utilizando la hidroponía, en fincas agroecológicas de la localidad, como la Finca Las Pirámides y la Finca Guadalajara.

Costumbres y tradiciones

Tacuba es un municipio lleno de costumbres y tradiciones. Sus fiestas patronales se dedican a Santa María Magdalena, en la fecha comprendida entre el 19 y 22 de junio.

Sus habitantes son fervorosos devotos del catolicismo y con mucho arraigo a su herencia cultural, la cual transfieren a sus generaciones, en las diferentes manifestaciones, como artesanía, música, danza, lengua, etc.

Otras celebraciones que se llevan a cabo en esta localidad son Las Cofradías y Las Primicias, en las cuales se tiene por costumbre solicitar la bendición de Dios para tener cosechas abundantes. Los devotos se encargan de la decoración en la cual destacan frutas, verduras, y hojas de palmas.

Los habitantes ofrendan el producto de sus cultivos y en medio de la ceremonia hacen bailes típicos como la danza del tigre y el venado, alegóricas al acoso que  sufrieron los indígenas en el pasado.

Y algo más…

Tacuba ofrece a sus visitantes hospedaje, comida tradicional y comida rápida, transporte, un sistema de telefonía de amplia cobertura, sistemas de radio comunales, alumbrado público, sistema de banca, salud y otras de carácter informal.

En lo gastronómico, es importante señalar que, su  arte culinario se basa en su origen indígena; y está basado en recetas derivadas de un producto muy cultivado en la zona, como es el maíz.

Ciertamente, Tacuba es un lugar para apreciar el pasado, viviéndolo en sus vestigios, tradiciones y costumbres.